El diseño de esta grandiosa iniciativa fue encargado al italiano Ricardo Morandi, y su construcción a la firma bogotana Cuéllar Serrano Gómez S.A., y es en ese momento que la CCB al lado de la CORPORCIÓN CIVICA DE LA CIUDAD y otras organizaciones interviene para trabajar en el análisis y proyección de la propuesta, además por supuesto de motivarla. La CCB anota con esta gestión un avance en el sistema de transporte interdepartamental y define un nuevo momento en el clima empresarial e institucional de la ciudad. Es importante anotar que el análisis realizado recomienda en ese momento una altura de 40 metros; finalmente el gobierno nacional decidió hacer la obra con tan solo 16 metros de gálibo, lo cual frenó la expansión del puerto de Barranquilla aguas arriba del puente.
Es importante destacar el apoyo que entregó la Entidad -a través de la Corporación Cívica de Barranquilla- para el diseño, los conceptos técnicos y aprobación del Gobierno Nacional con miras a la construcción del Puente Pumarejo.
Corrían los años 60 y la construcción de un puente que uniera a Barranquilla con el margen oriental del Río Magdalena era una necesidad para el desarrollo económico de la región. En esa época el paso de los vehículos de un lado al otro del río se cumplía por medio de dos transbordadores “El Magdalena” y el “Atlántico” con capacidad de 30 carros cada uno. Los libros registran que en 1967, por ejemplo, utilizaron el servicio un promedio de 890 vehículos por día. Las congestiones y colas eran permanentes.
La Corporación Cívica de la Ciudad, de la cual hacía parte esta Cámara de Comercio, con motivo de las diferentes alternativas que el Ministerio de Obras presentó para la construcción del Puente sobre el río, nombró una comisión que estudió la mejor alternativa para los atlanticenses. El Comité y la Cámara de Comercio -presidida en ese entonces por Gastón Abello- sugirieron que la altura del puente fuese de 40 metros y no de 16, como estaba planteado. El Comité argumentaba que “una altura inferior establecía un límite para el desarrollo de una zona de vasto potencial industrial”. Sin embargo, el Gobierno de Alberto Lleras rechazó la propuesta que agregaría $40 millones a los $143 millones del total del proyecto. Una decisión que aún lamentan los empresarios locales.
El Puente Pumarejo, en honor a su gestor, Alberto Pumarejo, fue diseñado por el italiano Ricardo Morandi, tiene 3.383 metros de longitud incluyendo las vías de acceso, su altura es de 16 m y es sostenido por 56 columnas que forman 29 tramos de luces en vigas prefabricadas de 47 metros.
La construcción del Puente Pumarejo se llevó a cabo con la más alta ingeniería de la época: 332 pilotes a profundidades de 20 a 30 mts., vigas de hasta 120 toneladas de peso, grúas, barcos, andamios y centrales de mezcla fueron parte del arsenal utilizado para cumplir con esta obra sin lugar a dudas como una de las importantes del siglo pasado.
El puente fue inaugurado el 6 de abril de 1974 por el Presidente Misael Pastrana Borrero y desde entonces cambió sustancialmente la dinámica regional y quedó modificado para siempre el paisaje del Río Magdalena.